La ciudad de Buenos Aires, epicentro de la política represiva, concentra innumerables sentidos sobre el pasado reciente. Desde 1983 y hasta la actualidad, han proliferado iniciativas individuales y colectivas, públicas y privadas, destinadas a establecer marcas en el espacio como vehículos para la transmisión de la memoria sobre lo sucedido durante el periodo de la última dictadura en nuestro país.
Marcas de memoria. Huellas del pasado reciente en la Ciudad de Buenos Aires es un recurso elaborado por Memoria Abierta que busca narrar y documentar los procesos de organización territorial, barrial, comunitaria, gremial, cultural, estudiantil, así como las múltiples articulaciones entre Estado y sociedad civil, que fueron dando forma a la construcción de memorias en el espacio público. La herramienta pone en valor esos procesos de memorialización, sus actores, estrategias, soportes, así como las coyunturas específicas de su aparición a través de una colección de las marcas más significativas.
En 2009 Memoria Abierta había publicado junto con la editorial universitaria EUDEBA Memorias en la ciudad. Señales del terrorismo de Estado en Buenos Aires. Este libro fue el resultado de una investigación que relevó -de modo exhaustivo hasta ese entonces- las marcas de la memoria sobre lo sucedido durante el periodo de la última dictadura ubicadas en la ciudad.
Desde la publicación de aquel libro, estas inscripciones de la memoria en el espacio urbano aumentaron en cantidad y diversidad, dando continuidad al proceso de memoria en la ciudad. En Marcas de memoria. Huellas del pasado reciente en la Ciudad de Buenos Aires se incluyen baldosas, sitios de memoria, espacios verdes, murales, monumentos e incluso otras efímeras como marchas y escraches y más recientemente acciones convocadas y difundidas a través de redes sociales.
Para dar cuenta del proceso de memorialización, el recurso está dividido en cinco ejes. De la resistencia a la democracia da cuenta del emblemático espacio que constituye la Plaza de Mayo y de las marcas, tanto materiales como efímeras, que se inscriben allí: las rondas de los jueves, las marchas de los 24 de marzo y de la resistencia, los pañuelos pintados, etc. De la Plaza a los barrios muestra cómo las marcas comienzan a irradiarse hacia los barrios: desde las prácticas de los escraches en tiempos de impunidad hasta la instalación de baldosas por la memoria. Memorias en expansión se centra en mostrar otras voces que surgen en el proceso de memoria, verdad y justicia y que comienzan también a instalar marcas en la trama urbana. Integran este eje marcas vinculadas al mundo del trabajo y de la educación, clubes de fútbol y colectividades. El Estado hace memoria se ocupa de mostrar el proceso de institucionalización por el cual los espacios en los que funcionaron centros clandestinos de detención se transformaron en espacios de memoria. El último eje, Marcas sin territorio aborda un fenómeno reciente que se profundizó en tiempos de pandemia: la generación, convocatoria y realización de marcas de modo descentralizado, autogestivo y difundido en redes sociales.
El recurso Marcas de memoria permite recorrer la ciudad de Buenos Aires gracias a la posibilidad de georreferenciar las marcas de memoria, además de ofrecer información y diversas fuentes documentales y testimoniales que dan cuenta de ellas. También brinda la posibilidad de realizar recorridos para visitar marcas vinculadas entre sí en función de diferentes criterios.